El estudio introductorio de Roberto Antonelli resume de manera eficaz los objetivos fundamentales de este volumen, presentando las emociones como revelación de lo humano gracias a la conjunción de significante y significado, gracias a la unidad del signo y del sistema lingüísticos, sin renunciar a lasignificatividad del significante, sino más bien poniéndola en valor como componente esencial del signo poético, pero sin asumirla como único aspecto y función del signo. Sentimientos y emociones son analizados como verbalización de esas emociones a través del léxico propio de las mismas, abierto a todas las innumerables posibilidades que se ofrecen al investigador, desde el análisis retórico y el recorrido diacrónico garantizado por los “topoi” hasta la crítica estructuralista, semiológica y deconstructivista, al cronotopo bachtiniano, en una perspectiva literaria que, precisamente por ser íntegramente literaria, está abierta ante todo a la función de las emociones literarias en la historia de la cultura europea y en la formación de sus ciudadanos.